Teniendo en cuenta la enorme cantidad de prestaciones y avances tecnológicos que se han ido incorporando en los coches modernos, muchos conductores se sorprenden al descubrir que los neumáticos siguen siendo el principal factor que influye en la seguridad, eficiencia y confort de la conducción.
No en vano, los neumáticos son el único elemento del vehículo que está en contacto directo con la calzada. Es por ello que factores como la adherencia, la estabilidad o la distancia de frenado se ven directamente afectadas por el estado y la calidad de aquellos.
El nivel de consumo de combustible y, por ende, el de las emisiones de CO2 y gases contaminantes también viene determinado, en buena medida, por las cubiertas que estés utilizando.
¿Cuáles son los ámbitos de conducción afectados por los neumáticos?
Tal y como te indicábamos hace un momento, los neumáticos tienen un protagonismo global en la experiencia de conducción.
Neumáticos y Seguridad
En primer lugar, influyen en la seguridad. La precisión en los movimientos de la dirección es un ámbito fundamentalmente dictaminado por el rendimiento de los neumáticos.
Sin embargo, también hay otros aspectos de la seguridad, como la estabilidad en el paso por curva, la tracción sobre mojado y, por supuesto, el fenómeno del aquaplaning, en los que los neumáticos asumen cerca del 50% de la responsabilidad en el comportamiento del coche.
De acuerdo con datos proporcionados por Continental, la distancia de frenada en mojado se reduce en un 19% cuando se opta por neumáticos de alta calidad.
Neumáticos y Eficiencia
La elección y estado de los neumáticos tienen tanta influencia en el consumo de combustible como la tecnología utilizada en el motor de tu coche. Es más, el kilometraje recorrido puede llegar a ampliarse exponencialmente con el uso de un compuesto de alto rendimiento.
Si quieres aprender a reducir el consumo de gasolina al máximo, te recomendamos la lectura de nuestro artículo especializado.
Neumáticos y Confort
El confort experimentado durante la conducción es el factor más subjetivo de cuantos estamos indicando. Sin embargo, elementos como el ruido y las vibraciones generadas por el rozamiento de la superficie de rodadura sobre el asfalto pueden ser fácilmente medidos y comparados.
En este sentido, este elemento de tu vehículo, junto con el motor, son los componentes del vehículo que más influyen en la generación de este tipo de molestias.
Neumáticos y Mecánica
La mecánica de tu coche también se resiente cuando los neumáticos no están rindiendo de la forma adecuada. Unas gomas con poca elasticidad –como las que se presentan en los neumáticos viejos y agrietados– no son capaces de absorber las vibraciones de la manera adecuada. Obviamente, aquello que el neumático no neutraliza es transferido a la suspensión y, través de ella, al resto de elementos mecánicos.
Descubre aquí cuáles son las averías mecánicas más frecuentes.
¿Cómo afecta la calidad y estado de los neumáticos a la conducción?
El deterioro de los neumáticos y la siniestralidad
De acuerdo con un estudio realizado por Fundación Española para la Seguridad Vial (FESVIAL), el 55% de los accidentes de tráfico con víctimas mortales achacables a fallos del vehículo se deben a daños presentes en los neumáticos.
Desgraciadamente, un elevado porcentaje de los conductores españoles no prestan la debida atención al estado de las ruedas de su automóvil.
Es más, según los datos proporcionados por Michelin, alrededor del 10% de los coches circulan con neumáticos cuyo desgaste es superior al límite legal establecido; es decir, la profundidad del dibujo no alcanza los 1,6 mm que dicta la normativa de circulación.
Atención: el neumático gastado no sólo afecta a las condiciones de lluvia
Con frecuencia, se cree que el rendimiento de los neumáticos gastados sólo se reduce cuando llueve o con el pavimento mojado. Por supuesto, la capacidad de drenaje del agua con un dibujo menos profundo es considerablemente inferior a la óptima.
Sin embargo, la conducción en seco también experimenta un notable deterioro, lo que se manifiesta en un considerable subviraje en el paso por curva y un aumento de la distancia de frenada.
La presión de las ruedas como factor de seguridad y eficiencia
Además del peso, la aerodinámica y características del motor, la resistencia a la rodadura es un factor clave en el consumo.
Alrededor del 20% del consumo total de un vehículo se debe a la rodadura de los neumáticos. Para garantizar un rendimiento óptimo, los neumáticos deben contar con la presión específica recomendada por el fabricante.
Una presión inferior, aumentará la superficie de rozamiento y la resistencia del neumático. Esto provocará un incremento del consumo.
Según las cifras facilitadas por la firma Michelin, un neumático con una presión de entre 1 y 2 bares por debajo de la recomendada puede hacer que el consumo de combustible se vea incrementado en más de un depósito al año.
Llevar las ruedas con una presión superior a la especificada por el fabricante puede suponer un ligero descenso en el consumo de combustible. Desgraciadamente, la capacidad de agarre disminuye proporcionalmente, lo que supone un riesgo para la circulación.
Todos los contratos de Renting de LeasePlan incluyen el recambio de neumáticos, así como las revisiones y reparaciones mecánicas oportunas para que no tengas que preocuparte por nada más que por conducir.
