A lo largo de este artículo, vamos a explicarte qué son los neumáticos ecológicos y cuáles son las principales ventajas que los convierten en la mejor alternativa para tu bolsillo y para el medioambiente.
En la actualidad, la práctica totalidad de los grandes fabricantes, ofrecen modelos de este tipo. De manera que no hay ninguna dificultad a la hora de hacerse con ellos.
¿Qué son los neumáticos ecológicos?
Los neumáticos ecológicos son la respuesta de los principales fabricantes ante dos demandas tradicionales en el sector:
- La reducción del consumo de combustible.
- La minimización de la huella de carbono dejada por los neumáticos.
Conviene recordar que el sector del transporte y, en general, el tráfico rodado son los grandes responsables de las emisiones de CO2 a la atmósfera.
Por su parte, los neumáticos son los causantes de alrededor del 20% del consumo del vehículo. Esto es debido a la resistencia que presenta la rodadura sobre la superficie de la calzada, por lo general, el asfalto.
Este factor ha hecho que los neumáticos, junto con el motor, sean objeto de una gran inversión económica, con el objetivo de reducir el gasto energético causado por el desplazamiento del coche.
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¿Cómo se reduce el consumo de combustible?
La clave para un menor consumo está en la reducción de la resistencia al rozamiento por parte de la banda de rodadura.
Mediante la utilización de compuestos especiales, se ha logrado disminuir la fricción de los neumáticos en contacto con el asfalto. Esto hace que dichos neumáticos experimenten un menor recalentamiento y que el coche precise de menos energía para desplazarse.
¿Esto no es peligroso?
Es posible llegar a pensar que la baja resistencia a la rodadura pueda suponer una menor adherencia del neumático. Sin embargo, eso no es del todo correcto.
Para que los neumáticos presenten una buena adherencia, deben mantenerse dentro de un rango óptimo de temperatura. Por debajo de esta, no se dispondrá de suficiente adherencia. Por encima, el neumático se deteriorará rápidamente.
En cada giro, los neumáticos se aplastan contra el asfalto, lo que hace que se deformen y calienten. A esto último, se lo denomina histéresis; es decir, el consumo de energía en forma de calor.
Si se consigue reducir la resistencia a la rodadura, el gasto energético será menor. Por lo general, los fabricantes de neumáticos han optado por el uso de la sílice en cantidades masivas, para mantener bajo control el coeficiente de rodadura. Si bien, como veremos más abajo, los neumáticos ecológicos están yendo un paso más allá.
El objetivo es mantener los neumáticos a una temperatura adecuada, limitando la resistencia a la rodadura para evitar una ineficiente generación de calor y el consiguiente deterioro prematuro de la cubierta.
En definitiva, los neumáticos ecológicos no son peligrosos.
Descubre más detalles sobre cómo influyen los neumáticos en la conducción en nuestro artículo especializado.
¿Qué compuestos se utilizan en la elaboración de estos neumáticos?
Desde hace años se están produciendo continuos avances en los procesos de fabricación de las cubiertas de los neumáticos.
El principal foco de atención está puesto en la utilización de materiales alternativos. Uno de los mejores ejemplos es el de la sustitución del isopreno –un derivado del petróleo- por el biolsopreno. Éste último es un microorganismo que ha sido modificado genéticamente para desempañar las mismas funciones que su antecesor.
La sílice, a la que nos hemos referido anteriormente, también es una de las grandes candidatas a desaparecer de los procesos de fabricación con el paso del tiempo. Concretamente, se está experimentando con el uso de algas para la fabricación de las cubiertas.
¿Qué ahorro se puede conseguir con los neumáticos ecológicos?
En lo que se refiere al ahorro, las dos grandes ventajas de este tipo de neumáticos se basan en el menor gasto de combustible y una mayor longevidad de las gomas.
Por un lado, se estima que los neumáticos con baja resistencia a la rodadura posibilitan un ahorro de hasta medio litro de carburante por cada 100 kilómetros. Esto puede suponer una reducción de 100 euros anuales en los gastos de repostaje.
Si estás interesado en ahorrar gasolina, te recomendamos la lectura de nuestro artículo “12 trucos para ahorrar el máximo combustible posible”.
Además, el bajo nivel de desgaste permite que estos neumáticos puedan recorrer hasta 45.000 kilómetros. Se trata de una cifra considerablemente superior a la media de los modelos convencionales, la cual se sitúa entre los 30.000 y los 40.000 kilómetros.
Por supuesto, también hay que tener en cuenta que los neumáticos ecológicos tienen un precio de venta mayor. Dependiendo del modelo que escojamos, el precio puede oscilar entre los 70 y los 125 euros.
¿Cuál es la reducción de las emisiones de carbono?
De acuerdo con cifras facilitadas por el fabricante de neumáticos Michelin, este tipo de neumáticos pueden contribuir a reducir el nivel de emisiones contaminantes entre 4 y 7 gramos por kilómetro recorrido, en comparación con los neumáticos tradicionales.
No cabe duda de que el impacto para el medioambiente es bastante menor, lo que hace que nuestros desplazamientos habituales sean una forma mucho más ecológica y sostenible.